P A R A E N M U S I C A R T E

hit counterNúmero de visitas

16 de noviembre de 2012

MOZART, W.A., Concierto para clarinete, 2º movto.


Wolfang Amadeus Mozart (Austria, 1756-1791) es uno de mis tres compositores favoritos (para referencias: aquí, acá y acullá). Me parece un genio como la copa de un pino, absolutamente versátil, ingenioso, sencillo o profundo. En su malograda vida trabajó hasta la extenuación sin dejar de ser genial en cada una de sus más de seiscientas obras. En este caso, escuchamos el segundo tiempo del Concierto para Clarinete en La Mayor, K. 622. Una auténtica preciosidad. Este concierto para orquesta y solista de clarinete fue escrito en 1791 para Anton Stadler, un amigo, masón como Mozart, que tocaba este instrumento, una novedad de la época.


La orquesta que acompaña a la solista está formada por dos flautas, dos fagotes, dos trompas y cuerdas. Este concierto consta, como todos los conciertos del Clasicismo, de 3 movimientos: Allegro (en La mayor), Adagio (el que escuchamos, en subdominante, IV grado, es decir, Re mayor) y Rondó (La mayor). Como vemos, el concierto es una suma de contrastes.

El segundo movimiento, Adagio (despacio), comienza con la exposición por el solista del archiconocido tema de ocho compases, que es repetido en forma de eco por la orquesta tanto en su presentación como en el desarrollo de la melodía. Este desarrollo comienza justo después de la conclusión del tema principal por el tutti ("todos", la orquesta al completo), y luego por el clarinete. Este desarrollo se transforma en un tema secundario. Al terminar el desarrollo, se hace una pausa para la cadenza. La cadenza es un pasaje ornamental y ornamentado, a veces escrito por el compositor (en este caso) y a veces libre para la improvisación, que sirve al lucimiento del solista. Superada ésta, se escucha otra vez el tema principal en su reexposición por el solista, reforzada por el tutti, y el movimiento acaba con la Coda.

Una última cosa: esta entrada es para mi hermano Guillermo, que de pequeñín ya notaba que esta música tenía algo especial. ¡Un beso, Guillermo!



Naturaleza muerta con atributos de las artes (1766), Jean-Batiste Siméon Chardin (1699-1779).
¡Os recuerdo que está activo un magnífico sorteo, os invito a participar!

2 comentarios:

  1. Hola Isabel, esta entrada es un regalo, no es que este concierto sea genial, es insuperable. Que pena, una vida tan corta...con todo lo que llevaba dentro de sí.
    Y tu hermano y tú tenéis muy buen gusto. Enhorabuena...

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias por comentar. La verdad, a mí me parece una de las obras cumbre de este compositor. Mi hermano es un artista, con mucho gusto (no es sólo amor de hermana!!). Gracias otra vez.

    ResponderEliminar

¡Muchas gracias por comentar! ¡Hasta la próxima!

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...